Integrantes del Colectivo ‘Ni Una Menos’ que mantienen tomadas las instalaciones de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) en la Ciudad de México, lanzaron el mobiliario a la calle y le prendieron fuego.
Desde la mañana del miércoles, las mujeres se resguardaron en el balcón de la sala de juntas del edificio ubicado en la calle República de Cuba número 60, en el Centro Histórico.
Entre las manifestantes se encuentra Silvia Castillo, madre de Alan, un joven asesinado y calcinado en San Luis Potosí, y Marcela Alemán, madre de una niña que fue violada en un kínder también de San Luis Potosí.
Exigen una respuesta de las autoridades para hacer justicia y detener a los culpables.
Fuente: Excélsior