A partir del 1 de noviembre, la fuerza pública municipal y estatal de Nuevo León, además de estar facultada para suspender reuniones en casas, quintas o salones de eventos, podrá sancionar y arrestar a quien no use cubrebocas, adelantó el secretario de Salud del estado, Manuel de la O.
Entre las sanciones por no cumplir con esta medida sanitaria, destacó, se encuentra la de una multa económica, el trabajo comunitario o el arresto por 36 horas.
“Tenemos que ser más estrictos, así que hay que utilizar cubrebocas”, enfatizó.
Señaló que en lo referente a las reuniones en casas, la suspensión de la fiesta se dará cuando halla 20 personas o más reunidas.
“Hay una propuesta donde menciona (el decreto) lo siguiente: amonestaciones con apercibimiento donde existan 20 personas o más, esto equivale hasta por 16 mil veces el salario mínimo vigente, y arresto por 36 horas.
El objetivo no es multar, no es recabar recurso económico, el objetivo es cuidar la salud”, puntualizó.
Fuente: Milenio