El Año Nuevo será celebrado de manera distinta, pues el 2020 quedará marcado por la pandemia de Covid-19, que obligó a distintos gobiernos a aplicar medidas para prevenir contagios, como confinamientos y prohibición de reuniones.
Los repuntes de la epidemia han hecho que los festejos se deban realizar con el menor contacto posible pues, tras meses de restricciones, la emergencia sanitaria ha dejado cerca de 1.8 millones de muertos en todo el mundo.
Sin embargo, las celebraciones por Año Nuevo han llegado y así se han vivido en distintas partes del mundo.
Nueva Zelanda y un festejo ‘normal’
Después de que varias personas realizaran una presentación caracterizados con trajes típicos, el reloj de la Sky Tower inició la cuenta regresiva para el Año Nuevo. Al terminar, la multitud que se reunió en Auckland disfrutó de un espectáculo de fuegos artificiales.
Nueva Zelanda pudo celebrar la llegada de 2021 con relativa normalidad, solo quedan algunas restricciones, gracias a que no registra ningún caso de transmisión local desde hace meses.
Wuhan, festejos sin restricciones
Wuhan, la ciudad china donde se originó el Covid-19, recibió el Año Nuevo sin muchas restricciones sanitarias, pues miles de personas se reunieron para ver el espectáculo de fuegos artificiales sin guardar distancia social.
Con globos de colores de diversas formas, los habitantes de la ciudad se reunieron para despedir el año en que comenzó la pandemia de coronavirus. Entre la multitud, algunos llevaban cubrebocas, otros decidieron no ponérselo.
Sídney festeja con temor por repunte
En Sídney, la ciudad más grande de Australia, los fuegos artificiales iluminaron el puerto con una exhibición deslumbrante, a la que asistieron pocos espectadores.
Los planes para permitir grandes multitudes fueron descartados después de la aparición de un reciente repunte de casos, en el norte de la ciudad, que suma unos 150, por lo que se han restringido los viajes hacia y desde Sídney.
Tokio inicia el año cerca de la emergencia
Los habitantes de Tokio iniciaron el 2021 con la posibilidad de enfrentar un estado de emergencia, luego de que se registrara un récord diario de mil 300 nuevas infecciones por coronavirus.
Por ello, gran parte de la población tuvo que recibir el año tranquilamente en casa, pues el Gobierno solicitó evitar los eventos a medianoche y las multitudes de compradores.
Fuente: Agencias