Con 232 votos a favor, la Cámara de Representantes de Estados Unidos aprobó el proceso para un juicio político contra el actual presidente, Donald Trump, tras su rol en la violencia desatada por sus seguidores hace una semana en el Capitolio, mientras el Congreso debatía la ratificación de la victoria presidencial de Joe Biden.
Con 10 votos, los republicanos respaldaron esta medida propuesta por los demócratas, convirtiendo a Donald Trump en el primer mandatario en la historia de ese país en abrirle dos procesos de juicio político en menos de un año.
El primero, fue por abuso de poder y obstrucción al Congreso. Según la acusación, Trump intentó presionar a Ucrania para que interfiriera en las elecciones de 2020 para ayudarlo, sugiriendo a su homólogo de Kiev, Volodimir Zelenski, que investigara los negocios del hijo de Joe Biden.
Después, según los opositores, obstruyó el trabajó de la investigación en el Congreso al negarse a que sus principales asesores testificaran.
Trump se convirtió en el tercer presidente en la historia del país en ser juzgado por el Senado, después de Andrew Johnson en 1868 y de Bill Clinton en 1999.
Poco antes de que comenzara la votación, el segundo demócrata de la Cámara de Representantes, Steny Hoyer, instó a los legisladores a «rechazar la sedición, la tiranía y la insurrección», y votar para acusar a Trump «por Estados Unidos, por nuestra constitución, por la democracia, por la historia».
Ayer por la tarde, el vicepresidente de Estados Unidos, Mike Pence, había descartado invocar la Enmienda 25 para destituir a Donald Trump, a una semana de que el republicano deje el cargo.
En una carta dirigida a Nancy Pelosi, líder de la Cámara de Representantes, el vicepresidente estadounidense aseguró que invocar la 25 Enmienda no sería lo mejor para la nación ni sería compatible con la constitución de ese país.
«No creo que ese curso de acción sea en el mejor interés de nuestra nación o sea consistente con nuestra Constitución», escribió Pence en la misiva.
Fuente: Milenio