El juez federal de Estados Unidos, Nicholas Garaufis condenó esta tarde a la heredera del emporio Seagram, Clare Bronfman, a pasar seis años y nueve meses en prisión. Ella fue una fiel incondicional de Keith Raniere en su empresa NXIVM; fue hallada culpable de dos cargos en abril del 2019 y su sentencia se había pospuesto en al menos cinco ocasiones.
En la primera audiencia pública en la Corte Federal del distrito este de Nueva York, desde que esta ciudad fue declarada en marzo zona de desastre por la pandemia, la jornada se prolongó porque Bronfman enfrentó a nueve víctimas que leyeron duros reclamos.
“Creo que eres una depredadora. Debes sentir mucha vergüenza y autodesprecio, pues debes entender que hay vidas que destruiste”, le dijo entre lágrimas Susan Dones, una exmilitante de la empresa y miembro del grupo de disidentes conocido como NXIVM9 que manejaba el centro ESP en Seatlle. “¿Alguna vez consideraste que ellos (NXIVM) solo querían tu dinero? Creo que debes dejar que eso se hunda”, le aconsejó mientras Bronfman apretaba la mano de su abogado.
Barbara Bouchey, otra de las que pudo hablar frente a Bronfman, hizo un listado de las razones por las cuales considera a la acusada su “abusadora y tormento”, entre ellas la de hacer falsos alegatos para perseguirla judicialmente durante una década. Sin embargo, pidió al juez y los presentes “hacer todo lo posible para ayudarla a ver que ella (Bronfman) también era una víctima de Keith Raniere”. Si no podemos ayudar en esa rehabilitación, “cuando ella deje la prisión hay una alta posibilidad de que salga a hacer daño”, exclamó Bouchey quien confió haber perdido cerca de 14 millones de dólares por la persecución judicial de la empresa de Bronfman. Como la acusada no ha manifestado el más mínimo arrepentimiento y sigue clamando su inocencia, “entonces yo, y muchos otros, nunca estaremos a salvo”, dijo Bouchey al juez a quien le reclamó: “usted tiene que darme a mí y a muchos otros, un sentido de seguridad que hace mucho no conocemos”.
También se le permitió hablar a Sally Brink, quien dejó NXIVM en 2016 después de 13 años en la empresa. Ella advirtió a Bronfman sobre el peligro que implica seguir apoyando a falso gurú. «Mientras los apoyes (a Keith Raniere), no hay perdón para usted”, alegó Brink esta mañana. “No vas a curarte estando él en tu vida”, le recomendó.
También Toni Natalie, otra de las ex novias de Raniere que sufrió acoso judicial tuvo oportunidad de hablar de frente a Clare Bronfman. Ella contó como NXIVM la demandó y pasó más de ocho años en tribunales en total bancarrota mientras era seguida por un ex detective privado del Mossad. “No estaba quemada. Me incineraron”, dijo Natalie.
En prisión domiciliaria desde la primavera de 2018, Bronfman, de 41 años, se declaró culpable en abril de 2019 de dos cargos: robo de identidad al seguir usando la tarjeta de crédito y la cuenta bancaria de una novia fallecida de Keith Raniere, Pam Cafritz, lo cual les permitió evadir impuestos sobre la renta y una violación a las leyes de inmigración luego de usar declaraciones falsas para obtener visas y reclutar jóvenes mujeres mexicanas para trabajar en NXIVM.
Fuente: Milenio