El primer círculo del gobernador de Morelos, Cuauhtémoc Blanco, está siendo investigado por la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF) y la Fiscalía General de la República (FGR), luego de detectar redes de lavado de dinero y cuentas millonarias.
De acuerdo con Reforma, amistades del exfutbolista, familiares, su secretario particular y el jefe de la Oficina del Gobernador, están en la mira de las autoridades federales.
Jaime Tamayo Godínez, amigo que ‘El Cuauh’, a quien designó como apoderado de su marca ‘Cuauhteminha’, recibió en sus cuentas bancarias 558.2 millones de pesos entre 2013 y 2019.
La denuncia en contra de Tamayo fue presentada ante la FGR luego de encontrar pruebas de lavado.
La UIF identificó que en la cuenta de Santander de Tamayo 505.4 millones de pesos de agosto de 2016 a octubre de 2018 y pagos, uno de ellos por 5 millones de pesos para Comercializadora Prato, misma que fue catalogada como empresa fantasma o «fachada».
En el primer círculo del gobernador de Morelos, Tamayo es quien más dinero administra, no obstante la UIF denunció ante la FGR a Édgar Riou Pérez, primo y secretario particular de Cuauhtémoc Blanco, hizo depósitos injustificados a la esposa y al medio hermano del gobernador.
El 12 de febrero de 2019, Riou depositó 200 mil pesos a Natalia Rezende, esposa de Blanco, y el 29 de septiembre de 2016 retiró 160 mil en un cheque a favor de Ulises Bravo Molina.
Por dichos movimientos, la UIF no denunció a la esposa de Blanco, pero sí a Riou y a Bravo.
Si bien el organismo reconoció que los montos no son significativos, apuntó que son injustificados pues no se advierte una relación distinta que la del parentesco.
Asimismo, la FGR también investiga a José Manuel Sanz, Jefe de la Oficina del Gobernador, luego de la compra de un departamento subvaluado y por depósitos a sus cuentas en Estados Unidos superiores a los 25 millones de pesos.
La investigación señala que sin tener registro de ingresos propios, Claudia Mondragón Sánchez, esposa de Sanz, adquirió en 1.4 millones de pesos un departamento del Condominio Forest Hills, en Cuernavaca, cuyo valor comercial era en realidad de 4 millones.
La vendedora era Julieta Valderrama, cuñada de Juan Diego Pons, director del Fideicomiso del Fondo de Competividad y Promoción del Empleo de Morelos
Fuente: La Silla Rota
