Una multitud de aficionados y personalidades del deporte y la política comenzaron a llegar este jueves a la Casa Rosada de Argentina, para despedir al ícono del futbol, Diego Armando Maradona, quien falleció a los 60 años por una insuficiencia cardiaca.
La muerte de uno de los mejores y más carismáticos futbolistas de la historia, acaecida el miércoles en su casa de los suburbios de Buenos Aires, disparó hondas reacciones y homenajes en todo el mundo, incluyendo a mandatarios y al papa Francisco.
Medios argentinos esperan que hasta un millón de personas se acerque a despedir a su ídolo a la Casa de Gobierno, un número enorme en medio de la pandemia de coronavirus que sacude al mundo.
En un anticipo del velatorio, que la familia decidió que se extienda hasta la tarde del jueves, decenas de miles de argentinos salieron a las calles a rendirle homenaje, dejando flores y mensajes en lugares emblemáticos de su vida en Argentina.
Una multitud colmó durante toda la noche la Plaza de Mayo, frente a la Casa Rosada, para rendir homenaje al astro y esperar para darle su adiós.
A las 6 de la mañana se abrieron las puertas del Palacio Presidencial. El féretro con los restos de Maradona estaba cubierto con una bandera de Argentina y una camiseta de la selección nacional con el número 10, como la que usaba el astro.
Los simpatizantes, muchos emocionados hasta las lágrimas, pasaban por delante del féretro ubicado detrás de una valla cubierta con los colores de la bandera argentina, y arrojaban flores y camisetas en señal de cariño.
El histriónico y polémico ídolo había alcanzado fama global tras el genial campeonato que jugó en México 1986, donde llevó a Argentina a su segundo título mundial con algunos de los goles más recordados de la historia de la Copa del Mundo.
‘Diego’ o ‘Pelusa’, como se lo conocía, tuvo una prolongada carrera que incluyó su paso por Argentinos Juniors, Boca Juniors, Barcelona de España y Nápoles de Italia, entre otros clubes.
El velatorio de Maradona obligó al cierre de varias calles céntricas de Buenos Aires, por donde los simpatizantes caminan abrazados, llorando y cantando.
El ídolo arrastraba diversos problemas de salud por sus abusos con drogas y alcohol y, semanas atrás, se le había practicado una cirugía craneal. En más de una oportunidad en las últimas décadas, debió ser internado de urgencia para salvar su vida.
El Gobierno de Argentina decretó tres días de duelo nacional, mientras que los homenajes -que comenzaron con minutos de silencio en la Copa Libertadores y la Liga de Campeones e incontables muestras de afecto en las calles y en las redes sociales- se repiten en todo el mundo.
Fuente: Agencias