La bancada del PAN en el Senado presentó una queja formal ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) contra el presidente Andrés Manuel López Obrador; el secretario de Salud, Jorge Alcocer, y el subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud, Hugo López-Gatell, por omisión y negligencia en el manejo de la pandemia de coronavirus y violaciones a derechos humanos.
Los legisladores pidieron a la CNDH una investigación por violaciones a derechos humanos que culmine con una recomendación pública.
En la argumentación de su queja, los panistas acusaron al Gobierno federal de poner en riesgo derechos fundamentales que son básicos y primordiales para las personas: derecho a la salud, derecho a la vida y derecho fundamental a la subsistencia económica.
Indicaron que el Gobierno no ha recomendado mediante acto administrativo alguno el uso de cubrebocas en determinados contextos, tanto para servidores públicos como para particulares. Además, se ordenó una apertura apresurada de las actividades no esenciales.
Recordaron que las instancias internacionales han recomendado el uso de cubrebocas entre las medidas de prevención y control para limitar la propagación de Covid-19. Exigieron la expedición de una norma administrativa de carácter general, en la que se recomiende enfáticamente el uso de cubrebocas bajo los lineamientos dictados por la Organización Mundial de la Salud (OMS).
Los legisladores demandaron revertir la apertura evidentemente apresurada de las actividades no esenciales y desmentir el uso de estampas religiosas y nanomoléculas de cítricos para protegerse del coronavirus. Propusieron el otorgamiento de subsidios a empresas que tengan inscritos trabajadores en el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), en el que el gobierno asuma de 50 a 30 por ciento la nómina de los trabajadores.
Pidieron que se otorguen subsidios para agua, luz y gas en aquellas zonas con alto grado de marginación y se tomen medidas para incentivar que los propietarios reduzcan el precio de la renta en al menos 30 por ciento cuando se trate de negocios que no puedan operar. Además que no se cobren recargos, multas ni actualizaciones a aquellos negocios que se vean afectados por la pandemia.
Los panistas cuestionaron el uso del Modelo Centinela que no es recomendado internacionalmente para el control de la pandemia y criticaron la falta de pruebas masivas para la detección oportuna del coronavirus y el maltrato y desprecio al personal médico, al que ni siquiera se le ha otorgado el material de protección indispensable y necesario.
También, acusaron al gobierno federal de omisión por no impulsar la determinación y entrega de un Ingreso Básico Universal (IBU) para apoyar a todas las personas económicamente activas, formales o informales afectadas por la pandemia.
Fuente: Milenio
