José Ángel Córdova Villalobos, secretario de Salud durante el gobierno de Felipe Calderón, advirtió que reanudar actividades en la fase de la pandemia de Covid-19 que vive el país, sin hacer pruebas masivas que permitan a las autoridades sanitarias encontrar casos positivos, seguir a sus contactos y evitar una mayor diseminación, “es suicida”.
“Hemos estado navegando en la incertidumbre. Las pruebas que empezaron a hacer son insuficientes porque ya vamos en más de 200 mil casos, que multiplicado por 10 o por 20, fácilmente podríamos pensar que hemos tenido alrededor de 2 millones de casos, si no es que más”, indica.
Señala que en el caso de los decesos “hay muchas cifras volando que no han querido certificar” y afirma que hay numerosas muertes en el primer semestre del año, “seguramente por Covid-19”, pero que fueron catalogadas como neumonía típica o enfermedad respiratoria no clasificada.
El responsable de la estrategia del gobierno mexicano para enfrentar la epidemia de influenza en 2009 también advierte que ha habido confusión sobre cómo calcular las cifras, “porque al principio no nos dijeron de la estrategia Centinela, [pero] porque aparecían muy poquitos casos.
“Aunque ahora se estén haciendo un poco más de pruebas, desde mi punto de vista el gran talón de Aquiles ha sido no haber atacado esto con las pruebas suficientes, no seguirlas aplicando. Veo con gusto que la gobernadora de la Ciudad de México ya cambió de opinión, se deslindó un poco de la orden federal.
Lo mejor es poder hacer muchas más pruebas, para así poder encontrar los casos positivos y, al seguir a los contactos, evitar la diseminación. De otra manera, salir a reanudar actividades es suicida”, aseguró.
Córdova Villalobos señaló que hoy, ante la extensión de la pandemia, existe un dilema para los ciudadanos: guardarse para tener salud física o no hacerlo para tener salud financiera. Consideró que el reinicio de actividades se adelantó un poco, debido a la presión económica.
Respecto a que México está en los primeros lugares de contagios en el mundo y sobre lo que tienen que hacer las autoridades para que el país empiece a ver un panorama positivo, respondió:
“Sigo insistiendo, hay que aplicar las pruebas para identificar a las personas positivas y ayudarlas, ais- lar a los contactos y, de esta manera, tratar de cortar la transmisión. Se seguirán dando [los contagios], pues no sabemos si los que tienen que ir a trabajar y que andan en el Metro o en los tianguis, cuántos de ellos son asintomáticos o tienen pocos síntomas. [Además], agregado a esto, la ignorancia de algunos que no creen en el virus».
Consideró que las pruebas de Covid-19 deberían ser gratuitas, y afirmó que los mexicanos deben acostumbrarse a vivir con este virus, pues la única posibilidad de que desaparezca es que más de 70 por ciento de la población haya estado en contacto, cuando se da una “inmunidad de rebaño”, y cuando ya no se transmite el virus porque hay defensas, ya que este desaparece porque lo matan los anticuerpos que tiene la persona.
Siendo optimistas, dijo, quizá en octubre puedan darse condiciones para que la mayoría reinicie sus actividades normales.
Fuente: El Universal