En un contexto donde las especies invasoras representan un desafío creciente para los ecosistemas estadounidenses, un pez de aspecto inusual y capacidades sorprendentes captó la atención de las autoridades: el Channa argus, más conocido como pez cabeza de serpiente del norte.
Este animal, que puede alcanzar casi un metro de longitud, respira aire atmosférico y es capaz de desplazarse sobre tierra firme durante varios días. Su presencia ya se considera un riesgo significativo para la fauna, tanto por sus hábitos depredadores como por su notable capacidad de supervivencia en ambientes donde otros peces no logran subsistir.
Son “depredadores agresivos”, según explica la reciente alerta del Departamento de Conservación de Missouri a los residentes publicada el 7 de abril pasado. Pueden reproducirse y crecer rápidamente, desplazando a las especies autóctonas al engullir peces pequeños, crustáceos y otros bichos. “Esto podría convertirlos en una amenaza para la pesca comercial y recreativa”, agrega el comunicado.



