Perú inició este jueves una cuarentena nacional de cuatro días, en coincidencia con el feriado de Semana Santa, para contener los contagios de Covid-19, que alcanzaron cifras alarmantes a fines de marzo.
Las calles de Lima y del vecino puerto del Callao lucían semivacías y solo estaban abiertos los comercios de alimentos y farmacias. Los restaurantes atendían exclusivamente con entregas a domicilio o retiro en el local, según una medida decretada hace dos semanas.
Numerosos agentes de la policía se desplegaron en algunas avenidas de la capital peruana para controlar a los pocos automóviles y autobuses que circulaban, según imágenes del Canal N de televisión.
La circulación de peatones y bicicletas está permitida solo para la compra de bienes esenciales, con el fin de contener los embates de la segunda ola de la pandemia.
También quedó suspendido el transporte interprovincial terrestre y aéreo hasta el sábado.
En Perú rige un toque de queda nocturno desde hace casi 13 meses, así como la prohibición de reuniones públicas.
La semana pasada, los contagios llegaron a 9 mil 078 al día en promedio (desde 7 mil 703 la semana previa), superando el récord de la primera ola de 8 mil 340 diarios, la tercera semana de agosto.
Desde hace dos meses hay casi 200 muertos al día en promedio, según las cifras oficiales.
Fuente: Agencias