La muerte de Diego Armando Maradona sigue generando muchos temas, pues la justicia argentina está investigando su fallecimiento por posible «homicidio culposo»; por ello, se están recabando varias pruebas de los familiares y Leopoldo Luque, neurocirujano que operó al 10 de un hematoma subdural en la cabeza.

De acuerdo con Infobae, pudieron tener acceso a las declaraciones de sus hijas, así como a los mensajes de WhatsApp que intercambiaban los familiares del Pelusa con el psicólogo y la psiquiatra.

En la declaración, las hijas hacen responsable a Leopoldo Luque de la atención médica de su padre, ya que mencionan que «lo vimos muy hinchado. Nos llamó mucho la atención eso. Sobre todo la panza y los párpados», se lee en el expediente de la investigación según el medio antes citado.

Respecto a las conversaciones de Whats en un grupo que hicieron con el psicólogo y la psiquiatra, Dalma Maradona pidió que su padre tuviera un médico de «cabecera», haciendo alusión a un médico clínico, ya que Leopoldo Luque es neurocirujano.

Dentro de la conversación, Dalma le aclara a Diego Jr. que lo que necesitaba su padre era un médico clínico para estar al pendiente de la rehabilitación.

Agustina Cosachov, psiquiatra del campeón del mundo, recomienda a una colega suya, pero Giannina Maradona asegura que buscará un médico por su parte.

Al final de la charla, Dalma pregunta sobre su padre, siendo Carlos Díaz, su psicólogo quien responde «estoy hablando con Maxi, me dijo que estaba viendo videos con Diego y que están muy bien. Que Diego reclama más privacidad, solamente».

Maxi es Maximiliano Pomargo, cuñado de Matías Morla, abogado de Diego Maradona y quien estuvo a su lado los últimos años; ambos se encontraban en la casa del exjugador el día de su muerte.

El medio menciona que tras su operación Maradona cambió un poco su carácter, ya que se encontraba controlado; no quería visitas y en ocasiones se encerraba en su habitación.

Toda esta conversación se dio tras una reunión a través de Zoom entre los más cercanos a Diego Maradona y sus médicos para organizar su rehabilitación.

Además, su psicóloga está en el ojo del huracán, ya que fue ella quien firmó el alta de Maradona y quien estaba a cargo de la medicación.

Fuente: Milenio